El muñeco de madera
se fue, se fue, se fue, se fue a la guerra.
Armado de punta en blanco,
se fue, se fue, se fue por todo el campo.
Llevaba armadura y era bigotón.
Montaba un caballo de esos de cartón.
Tenía escopeta de tejamanil
y decía que un soldado como él
vale por mil.
El muñeco de madera
llegó, llegó, llegó, llegó a la guerra.
Y al oír aquel estruendo,
volvió, volvió, volvió, volvió corriendo.